Espacios multimedia, interactividad, movimiento, realidad virtual, y también velocidad, información, inmediatez, innovación… son algunos de los retos a los que se enfrentan las marcas en la actualidad, una Era donde todo cada vez muta más rápido. La adaptación, la versatilidad y la interacción cobran relevancia. El entorno ha cambiado, ahora es (sobre todo) digital. La digitalización es un avance tecnológico que afecta a todos los sectores socioeconómicos y que crea un mundo más visual y complejo, donde la función del ojo del ser humano es la de escanear más que la de leer.
En la actualidad a cada persona le impactan de media semanal nada menos que 3.000 anuncios desde una perspectiva multicanal: televisión, radio, prensa, vallas, Internet… La mayoría de estos mensajes son estáticos o unidireccionales. El resultado es que los vemos pero no los procesamos: somos demasiado impacientes y sofisticados. Por ello, las marcas se enfrentan al hecho de que el coste para alcanzar un determinado nivel de recordatorio para se ha incrementado nada menos que un 62% entre los años 2001 y 2007.
¿Cuál es la estrategia ante este comportamiento de las audiencias? ¿Qué deben hacer las marcas? Es necesaria una perspectiva más amplia. Una percepción global para aproximarse incluye tanto involucrar a más sentidos con más funcionalidad y dinamismo (movimiento, sonido, interactividad…) como invitar a las audiencias a participar en la definición del universo de las marcas. La marca aspira a convertirse en plataformas sobre las que hacer cosas a partir de unos determinados valores compartidos. Un gigante como Ford es consciente de este mecanismo e invita a gente corriente a participar en el diseño de sus automóviles en un ejercicio de co-creación que está produciendo buenos resultados. Otro ejemplo es la industria de los periódicos: si hasta hace unos pocos años emitían sus mensajes de forma unidireccional ahora sin excepciones invitan a sus lectores al debate y a la participación.
Estos consumidores aspiran a establecer mayor complicidad con las marcas, sobre las que construyen plataformas para actuar y relacionarse. Las marcas deben proporcionar a sus clientes no sólo beneficios funcionales y emocionales derivados de los atributos del producto. Se debe superar este enfoque con experiencias que contribuyan realmente a mejorar su vida, optimizar su tiempo, expresarse como individuos y a crear espacios de identidad compartidos.
FAIL Perplexity Estamos en una carrera loquísima por ver quién va más rápido en el…
FAIL Google AI Aunque tuvo tiempos mejores, soy muy fan de Reddit. Es un ejemplo…
El ejercicio del branding requiere de inspiración. Pero en Summa creemos que debe ser también…
FAIL Bumble Bumble, la app de citas tipo Tinder, está viviendo algunas turbulencias por unas…
Rápido, ¿de qué color son las letras de Repsol? ¿Las letras de Coca Cola terminan…
FAIL Thermonator Las razas de perros, tal como las conocemos ahora, se originaron en la…