El caso de Chechenia y Kosovo
Las estrategias de branding y de naming son poderosas para garantizar el éxito y para remediar los fracasos. En los territorios con peor percepción internacional se estudian propuestas de mejora de imagen para, precisamente, desprenderse en la medida de lo posible de los atributos negativos.
Por ejemplo Chechenia está evaluando una nueva denominación para mitigar su negativa percepción internacional. Según declaraciones del pasado 4 de septiembre de Alu Alkhanov, presidente de esta república, el nombre de Chechenia suena como algo cortado y feo. Esta república de la Federación Rusa ha propuesto inicialmente el nombre de República de Noxciyn, una adaptación de la palabra que los propios chechenos emplean para describirse a sí mismos.
Otra iniciativa similar es la que está llevando a cabo el Gobierno de Kosovo, que han lanzado un concurso para adoptar una nueva bandera e himno nacional pese a que se sigue debatiendo una futura independencia o permanencia de Serbia. El biefing plantea que se reflejen los propios símbolos nacionales, incluyendo bandera, moneda e himno que reflejen su carácter multiétnico.