Una marca fuerte tiene un punto de vista propio sobre su sector, se guía por una idea de marca clara, diferencial y con recorrido y es capaz de crear una experiencia distintiva y reconocible. Cuando la estrategia de marca está bien definida constituye una plataforma que orienta las acciones, decisiones y comunicaciones de las empresas. Para el desarrollo de esta estrategia de marca -que servirá de base para el proceso de construcción de la marca- es conveniente llevar a cabo un análisis que nos permita saber en qué situación está la marca a través de un diagnóstico previo, para posteriormente realizar una reflexión estratégica y global. Mediante un análisis DAFO, identificamos y explicitamos las fortalezas, debilidades, amenazas y oportunidades que tiene una marca. En este artículo analizamos la importancia del análisis DAFO con ejemplos aplicados al branding.
Pasos para el diagnóstico y análisis de la marca
Para realizar un diagnóstico estratégico o análisis DAFO es necesario recopilar toda la información relevante sobre la empresa, el sector, los competidores y las tendencias de mercado. Solo así se podrá conocer en profundidad el punto de partida y los principales condicionantes del proyecto.
RECOPILACIÓN DE INFORMACIÓN CORPORATIVA. En primer lugar se debe recopilar toda la información relevante en relación a la marca con el fin de conocer en profundidad su situación actual. Visión, misión, valores, posicionamiento de la marca, materiales y campañas de comunicación, físicos o digitales, tipologías o mapa de marcas actual, casuísticas, usos y roles, entre otros. Se trata de realizar una auditoria de marca completa.
ENTREVISTAS. Es clave identificar todos los stakeholders internos y externos y realizar una serie de entrevistas individuales con el fin de contrastar la información disponible y conocer los diferentes puntos de vista que puedan haber sobre la compañía. Ya sea a través de entrevistas individuales o encuestas, cada caso determinará la necesidad de uno u otro.
BENCHMARK COMPETENCIA. Analizar y estudiar a los principales competidores en el ámbito nacional e internacional, analizando su propuesta de valor, estrategia de posicionamiento y comunicación ayudará a obtener un conocimiento de la situación de la marca. Son muchas las marcas que destinan esfuerzas y recursos para conocer su situación interior pero descuidan los elementos exteriores como la competencia y tendencias, que pueden afectar de igual o mayor manera en la estrategia de la compañía y su cuenta de resultados.
Análisis DAFO: ejemplo aplicado al branding
Cuando nos disponemos a realizar un análisis DAFO es importante tener en cuenta los elementos que debemos estudiar. Se deben además distinguir dos tipos de niveles para estudiar: el análisis interno y el análisis externo. Es decir, tan importante como conocer el mercado y la competencia es analizar qué está pasando en nuestra compañía. Solo a través de la combinación de ambos niveles se obtendrá un análisis completo y, en base a él, se podrán tomar las decisiones estratégicas y tácticas que tengan un impacto positivo en el negocio.
Gracias al DAFO las empresas pueden conocer su posicionamiento en el mercado y de esta forma, la toma de decisiones es más efectiva, guiando además la estrategia de marca a seguir.
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